Es muy cierto que para enseñar, lo que se dice enseñar, no hace falta ningún material especial ni excepcional. Es cierto que en muchas ocasiones solo se necesita de ganas y energía para trasmitir todos los conocimientos que se poseen pero hay momentos en que un buen material supone un antes y un después en el aprendizaje del alumnado. Bueno, por no hablar en la angustia del profesorado por querer hacer las cosas más fáciles, más limpias y ... también, más divertidas!!!
En esta ocasión les muestro tres materiales, simples y sencillos, pero que para mi rutina diaria vienen de maravilla. Por un lado tenemos estas tijeras con doble anclaje. Como muchos habrán comprobado el mundo del cortar es un quebradero de cabeza en según qué etapas y con éstas, el lío se va (no a acabar) pero sí a ser más llevadero. Personalmente, coloco los dedos índice y pulgar del alumno en las aberturas más cercanas a las hojas y en las posteriores, introduzco los míos y vamos guiando el cortado por el papel.
Es una manera de sentir kinestésicamente el gesto de cortar, ya que explicarlo sin vivirlo es un poco complicado.
En segundo lugar les presento la pintura "de dedos" más limpia de la historia. En realidad es una esponja enorme impregnada de pintura que sirve para muchos utensilios, desde los dedos pasando por sellos, estampaciones autoinventadas, rodillos de formas y texturas, etc... Me encantan, manchan lo justito y el resultado es precioso.
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Y para terminar, me encanta estos sellos de emociones. Aquí está la foto de "enfadado" pero también están la de "triste", "contento" y "asustado". Conceptos básicos que muchos alumnos pueden trabajar de esta forma tan divertida.
Este material creo que puede encontrarse en jugueterías infantiles especializadas pero la dirección que encontré en sus envoltorios fue la siguiente dirección.
Echar un vistazo a su catálogo y no me digan que no comprarían más de un artículo para sus aulas. Yo lo compraría todo!!!!!
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